Podríamos definir los smartphones como dispositivos que integran en la misma unidad las características de los teléfonos móviles y los asistentes personales o PDAs. Se han popularizado en los últimos años, y su potencia compite a menudo con la de los ordenadores más sencillos. Sin embargo, sus orígenes se remontan a 1992, cuando el IBM Simon fue presentado en el COMDEX. El Simon ofrecía -por 899 dólares- una interfaz basada en una pantalla táctil, sin botones físicos, con texto predictivo, agenda, funciones de pager y fax, y muchas de las funciones que hoy utilizamos a diario. Comercializado por BellSouth, fue el primer smartphone de la historia.